domingo, 3 de febrero de 2013

CAPÍTULO 1.2: LA CAVA


En las afueras del  Hospimil todos hablan de la remodelación del piso 8. Puertas adentro sólo hay el silencio y vistas gordas.

Facundo sale de su consulta de los martes con el urólogo y bastón en mano camina por el Hospital, sin rumbo fijo. Saluda las enfermeras, piropea a las pacientes contemporáneas con él y conversa con los médicos.

Facundo de 55 años es guardia nacional jubilado, y hoy tendrá una cita con el destino.

En su andar sin rumbo Facundo va a parar a la zona de carga y almacenes del Hospimil, donde hay un frenético movimiento. Un grave descuido de la vigilancia pone a Facundo a escasos 20 metros del momento de la descarga de un conteiner.

El montacargas baja lentamente una enorme y larga caja mitad madera y mitad plástico. En la caja se ve impreso un gran logo. ThermoWell D400. Que no pasa invertido por los ojos de Facundo.

Facundo exclama de manera cándida: ¡Ojalá tuviéramos una de estas en Bello Monte! y enseguida un personaje misterioso le pregunta. A lo que Facundo responde. ¡Claro! Desde que me jubilé mato tigritos como técnico en refrigeración de la morgue. ¡Esa cava es de última tecnología!

Facundo saca su celular y le toma una foto ante la escandalizada mirada del personaje. “Voy a enseñársela a mi nieto y a mis amigos en la morgue”, dice Facundo antes de despedirse.

La escena termina con el misterioso personaje viendo fijamente a los ojos del montacarguista.

Facundo emocionado va por la avenida San Martín camino al Metro. Cuando su camino es interrumpido por una pareja en moto.

Facundo padece de muchas enfermedades propias de la edad, menos de Alzheimer. Por eso sus últimas palabras antes de morir fueron: “!¿Hey y tú no eres el muchacho del montacargas?!

Estando en el piso 8 del Hospimil la cava ThermoWell D400 arranca Windows 7 mientras el misterioso personaje lee Últimas Noticias. En el titular de la última página, reservado a las noticas de sucesos, se lee: “Muere el viejito Facundo, de 18 disparos y para robarle el celular”.

No se pierdan el CAPÍTULO 3: INDESTRUCTIBLE







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