sábado, 18 de julio de 2015

CAPÍTULO 2.10: EL NEGRO Y LA LANZA


Por regla general la propaganda opera siempre a partir de un sustrato preexistente, ya sea una mitología nacional o un complejo de odios y prejuicios tradicionales; se trata de difundir argumentos que puedan arraigar en actitudes primitivas.

Regla de la Transfusión, principio 10 de los 11 principios de la propaganda
Josephn Goebbels, ministro de propaganda Nazi.


Una docena de sacerdotes Umpalumpa recorre el campo de Carabobo entre cantos africanos, humo del tabaco y escupitajos de aguardiente. El grupo rodea a un viejo sacerdote con una horqueta de árbol tallada en la mano, apuntando el tallo en todas direcciones, como buscando algo.


Sucede que en su trance el hombre de la horqueta está viendo el pasado. Remontado al 24 de Junio de 1821, plena Batalla de Carabobo, el anciano busca un lugar en particular. El sacerdote apunta a la cima de una colina y el grupo se detiene. El hombre observa en su visión a un hombre negro en uniforme militar color rojo, a la usanza de la época, atravesado con una lanza en el pecho, conversando brevemente con dos hombres blancos a caballo. Ambos hombres a caballo se bajan rápidamente en ayuda del negro. Uno de ellos, el más delgado sostiene al negro, mientras el otro, más fornido, extrae la lanza, y el negro cae muerto. Los dos hombres suben al negro al uno de los caballos y piden ayuda. El sacerdote apunta hacia el lugar donde ocurrieron estas cosas.
Minutos más tarde, una mini excavadora toma muestras de tierra del lugar, que son examinadas con sumo cuidado por los Umpalumpas, en busca de un rastro, que les sirva para cumplir un encargo.
 

Los hombres han desenterrado lo que parece la vieja y corroída punta de una lanza.




El sol brilla intensamente y a medida que vamos ascendiendo llegamos al espacio, donde el sol es sólo una estrella más en el universo. Recorriendo el espacio sideral, entre las cientos de miles de constelaciones y galaxias, llegamos al punto donde se origina el universo. Al otro lado de ese punto de luz intensa, está el cielo.



Miles de millones de nubes que rodean a un sol desde el que reina Dios. Sobre todas esas nubes hay enormes ciudades hechas con edificios que desafían cualquier regla del mundo físico conocido por los seres vivos. Allí viven las almas que han sido recibidas en la gracia de Dios.

Como en el mundo de los vivos, estas almas van y vienen, trabajan o gozan, crean y aman. Es un mundo donde el mal, no existe y reina la paz y el orden en medio de una sana, pero desordenada libertad. Algunos llamarán este mundo, la Nueva Jerusalén, el Edén o simplemente El Paraíso.


Conforme nos alejamos de esa enorme ciudad de almas y ángeles, entramos en los vastos campos. Allí están los viñedos, los pastizales donde los pastores llevan rebaños de ovejas, los ganaderos sus vacas y están los cañaverales, en especial un cañaveral inmenso que ocupa una nube entera, y en medio de él una planta con tres torres que constantemente sueltan humo dorado, y una pequeña casa en el otro extremo.


En el patio trasero de la casa del cañaveral, hay una gran fiesta. Es 24 de Junio, el cumpleaños de San Juan. Cientos de personas en procesión llevan a San Juan mismo en hombros por todo el inmenso patio celestial, mientras un grupo de hombres negros, en su mayoría tocan el medio centenar de tambores.


El dueño de la plantación y anfitrión de la fiesta, vestido de elegante traje y sombrero beige, anima a los miles de invitados a bailar al ritmo de los tambores y pasa revista de cada uno de los grupos de tamboreros, hasta que se encuentra con una novedad. Uno de los tambores “culo e puya” es tocado por un grupo de japoneses.


-¿Y esto?

-Vinieron de un "conservatorio" en el cielo japonés- responde uno de los músicos.

-Sí yo sé. ¡Pero vamos a darles más Ron para que toquen con fuerza! jajajajaaaa

El anfitrión sonríe y continúa su camino.

No muy lejos de la algarabía se encuentra un centenar de mesas, donde los invitados pueden sentarse a conversar calmadamente, jugar juegos de mesa o degustar algún fino manjar. No se puede decir que se sientan a descansar porque, en el cielo nadie se cansa.

Se escucha el característico sonar de las piezas de dominó, que desconcentra a los ajedrecistas y jugadores de cartas. Son los principales invitados de la fiesta, los libertadores, los héroes de la batalla de Carabobo, que todos los 24 de Julio se reúnen en la Fiesta de San Juan que cada año, desde 1822 se celebra en esas tierras celestiales.


En una de las mesas está Simón Bolivar haciendo pareja de juego con una de las eminencias de la medicina venezolana, el rejuvenecido doctor Convit. Los contendores, Sucre y José María Vargas.


-¡No puedo creer todo lo que ocurre aquí en el cielo! Es casi como estar en la Tierra. Fiesta, Ron y ¡Dominó con los Libertadores!

-Yo tampoco puedo creer lo fatal que juegas Jacinto. Nos falta perder esta partida y estamos listos- protesta un angustiado Bolívar mientras los contendores ríen.

De pronto se escucha el griterío de la gente que lleva en hombros a San Juan. Resulta que el homenajeado ha pedido que el anfitrión sea llevado en hombros también. Los jugadores de todas las mesas, voltean la mirada.
-Definitivamente este hombre fue uno de los que cambió el cielo. Las fiestas de San Juan no eran así antes que él viniera al cielo.

-¿Cómo eran Bolívar?

-Me cuentan, porque este hombre vino al cielo antes que yo, que antes las fiestas de San Juan, eran muy solemnes. Un coro de ángeles entonaba cánticos gregorianos mientras repicaban campanas. Unas palabras de Cristo, otras de María y otras de Dios mismo, y ya. 


Llega este hombre en 1821, y con un nutrido grupo de negros hace, al ritmo de los tambores, que la fiesta de 1822, sea el espectáculo del año. Claro, hasta 1957, que Pedro infante se le adelanta a todos cantándole las mañanitas con su mariachi.

-Pero la mayor sorpresa para todos, fue encontrarnos a Pedro siendo un hombre tan próspero acá arriba- dice Sucre sorprendido.


-Jacinto, cuando yo llegué al cielo, recién salido de mi “juicio”… esto que ahora llaman la “caseta de inmigración”, me encontré en la calle, con una maleta y unos cuantos talentos en mis bolsillos. Y estaba Pedro allí, como esperándome. Estaba en una carreta de carga, muy bien arregladita, por cierto. Y me trajo hasta esta casa en mitad de esta plantación. Va a sonar muy feo y racista esto que voy a decir, pero hasta el momento que Pedro Camejo me dijo, “Mi General, Bienvenido a mi casa”, yo pensé que todo esto era de alguien más. 
Una plantación es lo último que desearía ver o tener, un hombre de su condición, después de muerto. Había un ruido molesto, del chocar de unas botellas en la batea de carga de la carreta. Quité la lona a ver que era. Eran estas botellas de Ron, con la cara del Negro Primero dibujada en la etiqueta. Todavía no lo puedo creer.

  
-Nadie lo puede creer. A mí todavía me cuesta creer que haya whisky aquí arriba y que lo consigas en bombonas de gas- responde Sucre alzando una pequeña bombona amarilla con la etiqueta de una reconocida marca de blended escocés.



-¿Por qué el whisky acá arriba viene así?- pregunta el Doctor Convit.

-Es el impuesto de los Ángeles. Ellos van y recogen de los vapores que despiden las barricas de whisky en los almacenes de Escocia, Japón y Estados Unidos- responde José María Vargas mientras se sirve una nube ámbar brillante del gas espirituoso.

-Todos los libertadores nos fuimos quedando perplejos en nuestra primera parada antes de encontrar acomodo en este nuevo mundo.


-Bolívar, hablando del Rey de Roma- señala Sucre al ver venir al Negro Primero hasta la mesa de los libertadores y los médicos.

-¿Cómo la están pasando?

Todos responden al Negro afirmativamente.

-Es un placer estar en este lugar tan maravilloso y este Ron es lo mejor que he probado en toda mi vida. Siempre pensé que en el cielo te daban un par de alas, un arpa y deambulabas por las nubes y todo aquello…


-Hubo un tiempo que era así. Pero en la medida que los hombres fuimos trayendo nuestros conocimientos y sueños, fuimos cambiando el cielo. Yo por ejemplo, cuando llegué acá lo primero que hice fue reunir un grupo grande de negros que venían conmigo y con los talentos que cargaba compramos esta nube y montamos esta plantación. Luego hice realidad el sueño que siempre tuve cuando era un peladito esclavo. Hacer Ron. Aprendí de los dueños de la plantación en la que crecí: “Pon el jugo de la caña; Calienta allí; dale con el fuelle al alambique; pon las especias; abre la válvula; pon la chuleta, deja gotear hasta que deje de ponerse verde…”. ¡Todo un arte! Además, yo sabía que acá arriba se bebía vino y whisky, el franciscano Trinidad me lo dijo antes de la batalla de las Queseras del Medio. No mintió. Entonces ¿Por qué no destilar Ron? Y el Cielo es maravilloso, puedes beberte una botella de estas y no te embriagas, y puedes montar una fábrica de lo que quieras y se da sin dificultad. Puedes elegir entre trabajar o deambular de nube en nube. Y si eliges trabajar, nunca te cansas, ni te molesta hacerlo.


Bolívar se siente incomodado y observa a Vargas con cierta angustia. El Negro Camejo sigue en su exposición sobre el apogeo de la revolución industrial, y como las máquinas hacían el trabajo de mil negros. Vargas le hace una seña a Bolívar y este interrumpe al Negro:

-¿Has visto las noticias de Venezuela?

-¡Oh claro! Son lamentables. Pero yo no leo noticieros, me entero por la gente que recojo en el aeropuerto y que invito a trabajar en mi empresa. Hasta me contaron de la brujería que piensan hacerme en el Panteón Nacional. Si eso es lo que querías contarme-, el Negro sonríe y saca de su bolsillo un tabaco que enciende con la luz del sol. Los hombres de la mesa están sorprendidos.


-No entiendo, como me costó tanto libertar ese país para que cayera en manos de una banda de criminales, irresponsables e ignorantes. Celebran la independencia que les dimos, aunque los cubanos, chinos y rusos, no entienden que estamos celebrando. Imagino que el 4 de julio harán un “sepelio simbólico de George Washington” para ver si los dólares aparecen en las arcas del Banco Central.
-¡I HEARD YOU BOLIVAR! ¡THATS WON’T WORK!- grita George Washington, desde otra mesa en la que juega poker con Thomas Jefferson, Benjamín Franklin, John Adams, Abraham Lincoln y John Kennedy.


-Que me hagan un ritual loco pensando que les voy a dar algo no es lo que me preocupa. Miles de admiradores en el mundo de los vivos vienen a mí a pedirme cosas: fuerza, protección, salud, etc. Sólo cumplo si Dios pone su sello en la solicitud. Como cualquier otro santo de por aquí. Pero en ese caso, ese ritual puede salirles muy mal. Porque a diferencia de usted, Mi General, ellos no tienen mis huesos, cosa que de por sí, sólo les garantizó la muerte a algunos de ellos, empezando por el que organizó todo eso. Lo que si tienen es la lanza con la que me mataron, y esa lancita tiene su historia, y no es muy buena.

-¿De qué hablas?- pregunta Bolívar.


-Antes de cada batalla yo leía el tabaco, como todos los demás negros, para ver cómo nos iba a ir, y qué era lo mejor que podíamos hacer para vencer. En la Batalla de Calabozo, el tabaco me dijo que si moría, cremaran mi cuerpo y echaran mis cenizas al río o al mar. A la Virgen de las aguas pues… desde entonces esa fue última voluntad.
-¿Y la lanza…?- Sucre hace una morisqueta extendiendo los brazos.

-Bueno, Mi General Sucre, cuando estaba construyendo  el primer alambique, en 1823 y que funcionó hasta 1900, que fue cuando construí la plantota aquella- Señala el Negro la enorme planta de 14 alamiques y tres chimeneas, -recorrí el cielo en busca de un herrero que trabajara el cobre. Entre los muchos que conseguí, conseguí uno que había sido herrero de los Realistas. Era un buen hombre y lo conocí de vista, en vida, cuando era esclavo. En una de las fiestas de San Juan, como esta, él me contó, que hizo cientos de lanzas lujosas para el uso exclusivo de José Tomás Boves.


Los hombres de la mesa de dominó comienzan a ponerse serios, en especial Bolívar.

-Eran lanzas con la punta muy afilada, muy pulidas, talladas con finos motivos de la época, calzadas firmemente en varas pulidas de ébano africano. Al morir Boves quién sabe cómo se repartieron esas lanzas, pero una de ellas fue la que me mató. Si esa es la reliquia con la que piensan hacer hechicería, en mi nombre, pueden hasta llevarse un susto.

Bolívar toma su celular y le advierte al Negro que va a hacer un par de llamadas.


El pánico se apodera de los alrededores del Panteón Nacional. Lo que se supone sería la celebración de un ritual parece estar saliéndose de control. De la puerta principal del Panteón sale una figura humanoide de casi tres metros de alto y que lleva arrastras a Nicodemo.

Es una noche ligeramente lluviosa, muchos de los que huyen de pánico resbalan en las escalinatas de mármol pulido.

-¡Aaaaa ja j aja jaaa! ¿Qué es todo esto?

-¡Señor! Mire yo nunca fui bueno en la escuela, pero, El Negro Primero, no era catire ¿Quién es usté?

-¡Soy BOVES!…. oves… oves… responde el enorme esperpento con voz y eco ensordecedor.

 Un grupo de soldados se acerca y le disparan a la enorme figura demoniaca. Pero este con un gesto de sus manos los arroja lejos, decenas de metros.

-¡NO ME DISPAREN ESTÚPIDOS! Me van a matáaaaa….- grita lloroso Nicodemo, mientras es arrastrado por el enorme hombre desaliñado y despelucado, fascinado por los edificios que lo rodean.

-¡RESPONDE!... onde… onde ¿Qué es todo esto?

-Es Venezuela, en el 2015…

-Ja j aja. Los Curas si hablaban paj#$% y que el mundo se iba a acabar en 1900 Ja Jaaaa. Pues ahora todo esto será miiiioooo…

-No, no ¡Yo soy el presidente legítimo! ¡Soy criollito! Y macho porque me gustan las mujeres…

-¡Cállate fantoche! Apenas consiga un machete te corto en dos.

Un relámpago hace ver una luz azul claro detrás de las dos figuras malignas. El paso de Boves es interrumpido por una pared invisible cuyo choque lo hace tambalear y soltar a Nicodemo. Boves se sacude y voltea. Son tres ángeles. Uno de ellos parado con el brazo derecho extendido, mostrando la palma de la mano en gesto de parada. Otro de ellos observa y el tercero marcha lentamente en dirección al Panteón abriéndose paso entre la multitud temerosa que huye.


El engendro alza su brazo derecho, amenazante, contra el ángel que lo detiene, pero el segundo ángel descubre sus ojos y dos rayos que salen de ellos desmaterializando el brazo de la entidad demoniaca. Boves no siente dolor pero si grita de ira.

Nicodemo se arrastra sin mirar atrás, hasta caer por una de las fosas de la biblioteca nacional.

El ángel que detiene con su palma extendida, abre sus dedos y lentamente, comenzando desde el dedo meñique, cierra el puño. La pared invisible que detenía a la entidad, arropa a Boves, aprisionando todas sus extremidades contra su cuerpo, doblando su cuello y desfigurando su rostro. Este ángel que aprisiona al demonio fugitivo, señala el piso con su índice izquierdo y comienza a darle vueltas a su brazo izquierdo como formando un pequeño círculo.

El piso alrededor del Boves contorsionado y cautivo, empieza a licuarse como si se tratase de concreto recién vaciado, y este comienza a hundirse como en arenas movedizas. Boves murmura y pega chillidos mientras se hunde. Cuando sólo se pueden observar algunos rulos de su horrorosa cabellera, el tercer ángel arroja en el pozo de concreto movedizo el ánfora donde estaba la reliquia maldita, que también se hunde.


De vuelta en el cielo:

-¿Por qué no nos contaste antes estas cosas?

-Mi General Sucre, ustedes nunca me preguntaron, y no leyeron la entrevista que me hizo Chivo Negro en la “La Buena Nueva” hace seis meses.

-Ah sí, unas chicas muy amables la entregan en la entrada de la destilería a los turistas- responde Convit, mientras saca un ejemplar, que es tomado leído con atención por Vargas y este comienza a leer.




-Chivo Negro le pregunta a Camejo “¿Qué opina usted del pasaje de Eduardo Blanco que en «Venezuela Heroica» dice que usted, herido de gravedad, compareció ante el general Páez y con voz desfalleciente le dijo: «Mi general, vengo a decirle adiós porque estoy muerto»? 

A lo que Camejo responde: “Como me morí, no pude contarle a Eduardo Blanco lo que pasó en realidad sino cuando me lo conseguí acá arriba.”


Estando en el campo de batalla, acababa yo de matar a dos realistas, a punta de machete. A uno le rajé la panza y a otro le corté la cabeza. Pero hacia mí, corrió un oficial a caballo, que me arrojó una lanza que me atravesó el pulmón derecho. Como el hombre vio que yo no caía, emprendió carrera hacia mí, espada en mano. Yo lo esperaba con mi machete, pero un disparo lo echó al piso.


Parado allí moribundo con mi machete alzado escuché la voz de mi General Páez:

-¡Negro! ¿Por qué no está combatiendo?

Y al voltear les dejé ver la lanza en mi pecho a mis generales Bolívar y Páez, que estaban en sus caballos; Bolivar con el cañón de su pistola humeante, y señalando la lanza en mi pecho con las palmas de mis manos les pregunté:

-¿ES EN SERIO? ¿Qué NO VEN?
 A lo que Páez respondió:

-Esa es una herida menor, ¡no seáis respondón ni quejumbroso!

Mi General Bolívar en cambio, preocupado por mí, bajó de su caballo de inmediato a la voz de “¡Por el amor de Dios! José Antonio”. Me sostuvo por la espalda para recostarme y Páez removió la lanza.

-¡Catire! ¡Que lanza tan lujosa!…- fueron mis últimas palabras hasta que me vino a buscar la carreta para traerme aquí.

-Sí, recuerdo todo aquello- responde Bolívar.

-¿Sabe señor Camejo? Con la tecnología médica de hoy y los primeros auxilios adecuados, usted se hubiese salvado. Lo que tenían era que poner un apósito en el área de la penetración, asegurarla con una venda y no remover la lanza hasta llegar con los cirujanos.

-¿Están Oyendo? ¡Me hubiese salvado!

-Con la tecnología militar de hoy, un soldado español te da una ráfaga de disparos con una HK-G36 y no te salva nadie. Así que no te emociones- finaliza el Mariscal Sucre, entre la mirada atónita del Negro Primero y los hombros encogidos de los legendarios médicos.

=======================================================================
Dedicado a Nuestros Libertadores.

La segúnda del temporada #ComandantePanelo no ha terminado. No te pierdas las series

Verde Maduro Podrido tercera temporada
 Verde Maduro Podrido primera temporada
Sigueme por twitter

domingo, 5 de abril de 2015

CAPITULO 2.9: EL RITUAL


Los cinco Sacerdotes Mayores de la religión Umpalumpa han llegado a Venezuela, directo desde Angola, y son llevados a la presencia de Nicodemo, quién les explica toda su desgracia; desde el tema de la escasez de alimentos, hasta las sanciones impuestas por “El Negro Obama”, pasando por la congelación y confiscación de las cuentas de sus camaradas en todo el mundo.


Amiri, Mamadou, Menelik, Shakakúm y Makonem, escuchan con detenimiento los clamores y angustias de Nicodemo, y estudian con preocupación los mensajes de los oráculos, que no auguran un buen futuro para el tirano.


-Yo quiero que me hagan en mismo ritual que le hicieron a mi Comandante Panelo, para hacerlo un hombre fuerte y poderoso. Que todo lo que manda se haga con la  precisión y el temor de quien lo hace-, exige Nicodemo.

-Evaluamos realizar contigo “El Rito del Zodiaco Umpalumpa” pero en tu caso, no es tan fácil-, explica Amiri.

-¡Guá! ¿Y Por qué? Ya yo tengo negociado un León con el presidente de Zimbawe.


-De hecho el León es “EL REY DE LA SELVA”-. 
-Sucede que al Comandante Panelo se le realizó el ritual del "Zodiaco Umpalumpa" con un León, porque nació bajo el signo del León, igual que Fidel-. Explica Mamadou. 


-El Presidente Obama, nació bajo el signo del Águila Negra. El Águila Negra es “LA REINA DE LOS CIELOS”.


-El Presidente Putín de Rusia, nació bajo el signo del Oso Blanco. Este oso es “EL REY DE LAS GÉLIDAS ESTEPAS DEL NORTE”.


-¿AJA Y YO?- pregunta Nicodemo.

-¡TU NACISTE BAJO EL SIGNO DEL BURRO!-, sentencia Shakakúm.


-¡PERO BUENO MAMA””#$%&/BO! ¿QUE TE PASA A TI? ¡TE VOY A MANDÁ PA "LA TUMBA"!

-Él no miente Nicodemo. De hecho, todo lo que haces te sale mal porque tu signo no está bien aspectado para gobernar. Haces cosas que no son compatibles con tu naturaleza. Aunque hiciéramos el ritual con ese animal, no pasaría nada distinto de los que ya viene pasando-, Explica Menelik.

-Ustedes están combinados con los gringos y la CIA. Esto es una guerra psicológica ¡Llámenme allí a Yorch! Celia.

-Nicodemo, el antiguo "Zodiaco Umpalumpa" aparece en las tablas egipcias. No estamos inventando nada- Makonem le muestra las tablas con los jeroglíficos.


-¡YO NO ENTIENDO ESO!

-También hay una copia en español- Shakakúm le muestra un enorme libro.

-¡NO! no me muestres eso. A mí no me gusta leé. Me da dolor de cabeza. Además ese libro es demasiado grande-, Nicodemo suspira profundamente y se pasa la mano por la frente, -¡pero bueno, el burro manda en los campos!

-En los campos manda el Caballo, como el Presidente de China, Xi Jinping-, dice Amiri.


-Pero bueno, en las granjas puej…

-En las granjas manda el Gallo, como el Presidente de Francia, François Hollande.



-¡En los Rebaños, con las abejas!

-En los rebaños de Ovejas manda el Perro, como la Primera Ministro de Alemania, Ángela Merkel.


-¡PERO BUENO COÑ#””$%&/)=MADRE! ¡PÓNEMELA FACÍL! ¡RESUELVEME PANA! Te apuesto que el #CapitánHallaca tiene un animal arre&%$#”!imo.

-De hecho el signo de él es el del Gorila. Muy bien aspectado para mandar, aunque no sea con sabiduría ni justicia- termina Amiri.


-¿Pero qué solución tengo entonces?-, clama lloroso Nicodemo.

-¡Tranquilo Presidente! Para casos como el suyo, tenemos la opción del “Pacto”.

-Menelik, ¿El “Pacto”? ¿Cómo el de Punto Fijo?

-¡NO!... El “Pacto” es un ritual idéntico al del “Zodiaco Umpalumpa” sólo que en vez de ofrecer en sacrificio un animal de su signo, se sacrifican por lo menos dos almas puras e inocentes…

-¡Ohhh! ¿Y donde conseguimos unas almas así?

-¡Niños Nicodemo!- replica Shakakúm.

-¿Sacrificarán niñ…?

-¡Sí! Y debemos movernos rápido, porque  tenemos hasta el 20 de marzo, que es  Equinoccio de Primavera. Es el día en el que Umpalumpa está muy de buenas.


-Ordenaré al “Colectivo” que colaboren para hacer el “Pacto”.


Mercedes (@Meche) duerme junto a Piero (@ElPadrino) en su pequeño apartamento de Puente Hierro.

@Meche definitivamente no puede dormir, una pesadilla perturba su sueño y se despierta angustiada y sudorosa, mientras Piero ronca como el motor de un 747. Por más que Meche lo sacude, no despierta.

@Meche observa un resplandor debajo de la puerta. No se siente asustada, sabe de qué se trata. Semidesnuda, se levanta de la cama y se cubre con una sábana, del frío de la madrugada. 


Abre la puerta del cuarto y ve que en la silla de la cabecera de la mesa del comedor, hay una figura femenina hecha de luz blanca intensa que ilumina todo el apartamento. En el lado opuesto de la mesa hay siete cartas. @Meche toma asiento y observa con temor el mensaje que la mujer luminosa le transmite a través del extraño lenguaje criptográfico de las cartas.

El diablo y el ahoracdo son las dos cartas que encabezan la serie, haciendo que Mercedes se lleve las manos a la boca y conmovida, haciéndola llorar. Luego recorre la serie hasta las últimas dos. @Meche está aliviada, el caballo y el haz de espadas la alivian.





-¡Mi amor! ¡Hey! ¡Levántate!-, Mercedes abre los ojos. Tiene dos de las siete cartas del mensaje pegadas en la mejilla izquierda, restos del mazo de cartas en la mano derecha y las demás regadas en el suelo.

-¿Qué hora es Piero?

-Las seis. Te levantaste como a las dos. Te llamé un par de veces pero no me paraste, así que seguí durmiendo.

-¡Hay que hablar con Lucio y los muchachos urgentemente!


Horas más tarde, se ha convocado una reunión de emergencia en el Mando Central de “La Hermandad”. Mercedes Montero (@Meche) y Piero (@ElPadrino) están presentes; también está presente César Augusto (@LucioAugustoX), Romeo (@NIMITZCVN76), “La Guacharaca” (@Trucutrunes), Hernán (@Blackman) y su tío abuelo  Ismael Suarez el “Indodaendala” de la religión Sisanjo.


-La Virgen fue muy clara en el mensaje que me dio a través de las cartas. Los niños de este país corren peligro.

-Mercedes tiene razón, las otras videntes y brujas del país han visto lo mismo que ella vió. Unas en el tabaco, las cartas y los caracoles. Me llegan informes preocupantes.


-@Meche, “Guacharaca”, no es que no crea en la veracidad de sus revelaciones. Más de una vez nos han ayudado a resolver un caso, pero, no podemos andar poray alarmando a la gente.


-@LucioAugustoX.. Creo que ya se nos adelantaron- informa Romeo mostrando a los presentes el tweet de un miembro de otro movimiento, proyectado en la pared de la sala de conferencias.


-¿Qué dice la inteligencia Romeo?


-Ayer llegaron al país estos cinco sujetos- Romeo muestra las fotos. -Llegaron a las seis de la mañana en un vuelo de Cubana de Aviación, procedentes de Angola. Son Sacerdotes Mayores de la religión Umpalumpa. Dos de ellos son Angoleños y el resto son de La República Democrática del Congo. Amazon nos consiguió estas fotos del año 2002. En ese entonces, eran los tiempos del paro petrolero. Dos de los sujetos: Amiri y Shakakúm, llegaron al país. Hacían vuelos sobre las instalaciones petroleras, arrojando “polvos mágicos”. Luego, según esta documentación, esos vuelos se extendieron sobre las ciudades hasta la actualidad.

En 2006, en el marco de una cumbre del ASA, en Nigeria, estos cinco individuos Amiri, Mamadou, Menelik, Shakakúm y Makonem le ofrecieron a Panelo un León del Congo, del que se rumora, practicaron el “Rito del Zodiaco”. Luego se volvió a ver este grupo en 2010, durante la exhumación de los restos de Bolivar; en lo que llamaban el rito del “Ancestro Guerrero”.


Hay también un extraño cuento sobre “La Montaña”, en Yaracuy, en 2007, donde Panelo y estos personajes participaron. Pero el piloto que presenció estas cosas se dio de baja, se fue a vivir a Lyon en Francia y trabaja para Air-France. Que nuestra gente en Europa, lo localice e interrogue, tardará dos semanas o más, al final sería un despropósito.

César Augusto (@LucioAugustoX) permanece pensativo.

-¿Puedo interrumpir?- interviene Ismael Suarez el “Indodaendala” de la religión Sisanjo, con voz baja y serena.

-¡Claro! De hecho, era su turno- responde @LucioAugustoX, sacado de su silente preocupación.

-Es evidente que Nicodemo acude a los sacerdotes mayores Umpalumpa en busca de los “Tres Ritos Poderosos”. En su caso, el rito del “Zodiaco Umpalumpa” no lo puede hacer, porque él nació bajo un signo desfavorable… “El Signo del Burro”…

-¡Eso explica muchas cosas!- exclama sonriente @ElPadrino y @Meche lo golpea y le tuerce los ojos, para que se mantenga serio.

-El rito del “Ancestro Guerrero” también está descartado, porque los restos de Bolívar les fueron arrebatados, cremados y sepultados lejos del alcance de esta gente. Una operación en la que por cierto participó mi nieto aquí presente. Al final queda el rito del “Pacto”, en el que se ofrece las almas de por lo menos dos criaturas puras e inocentes, a cambio de fortuna, poder y otros favores- continúa Ismael.

-Una pregunta-, Interviene Romeo. -Si Panelo hizo todas estas cosas ¿Por qué murió?

-¿Romeo te llamas?... Cuando pides cosas a una entidad demoniaca como Umpalumpa, sumas a tu imperfección humana, la imperfección de una entidad que aspira ser como Dios, pero no lo es. Cosas materiales como el oro se pueden cumplir. Infundir miedo para lograr la servidumbre de otros, se pueden cumplir. Pero la salud, no se puede cumplir, porque la salud está íntimamente relacionada con la vida. Sólo el Dios Supremo, Bueno y Justo, da la vida. Umpalumpa, en cambio, no puede dar vida, menos salud. Aunque se lo pidas y hagas estos rituales a diario.

-¿Qué recomiendas? A parte de advertir a la población y recomendarle medidas preventivas- pregunta @LucioAugustoX.


-Proteger a los niños contra esta amenaza es más fácil de lo que cualquiera de los aquí presente puede pensar. “PROTEGER A LOS HIJOS”, alejándolos de los extraños, evitando que tomen rumbos desconocidos, tomándolos de la mano en las multitudes y vigilando los lugares donde están, es una tarea diaria y permanente, que se extiende a todos los miembros de la familia. Eso por un lado. Luego, cuando un padre o una madre, independientemente de su credo, le dicen a su hijo “Dios te bendiga”, antes de dormir o al dejarlo en la escuela; ya el niño está bendecido; ofrecido bajo la protección del Dios Supremo. Los Umpalumpa no  pueden usarlo para sus rituales; porque es una ofrenda que ha sido bendecida y ofrecida antes a otro dios. Hacerlo, acarreará la muerte inmediata de quienes practiquen el rito, aún antes de comenzar. Lo que se acuerde en este lugar para combatir esta amenaza, debe hacerse  antes del 20 de Marzo. Porque ese día es Equinoccio de Primavera.

Luego de esta explicación del viejo Ismael, la inspiración de @LucioAugustoX se enciende:

-Romeo y Amazon, haremos una campaña por las redes sociales, recomendando la protección de los niños a través de reglas básicas. Luego le indicaremos al Padre Freitas, al Pastor Mendoza, al Rabino Neuman, al Imán Alí y al monje Chen, que activen a sus feligreses, para que protejan “espiritualmente” a sus hijos, según lo que recomiende cada culto. Por último, nosotros vamos a acabar este problema, matándolo por la cabeza.

Los cinco sacerdotes mayores de la religión Umpalumpa se reúnen con Nicodemo (una semana después de la reunión de "La Hermandad") el mismo 20 de Marzo, día del Equinoccio de Primavera, para darle las malas nuevas acerca de la realización del Rito:

-Bueno, ya llegamos a la fecha ¿Qué pasó? ¿vamos a hacer la vai#”?

-Nicodemo, va haber que esperar al Solsticio de Verano, el 21 de Junio.

-¿Y ESA VAI$#%& Menelik?

-Los feligreses que tienes en este país han sido ineficientes- se excusa Menelik.

-No han podido conseguir las dos almas puras que se requieren para hacer “El Rito”- Shakakúm.

-¿Cómo QUE NOOO? ¡Miren, allá afuera hay muchachitos que jod#$%&!

-Sí, pero esos niños no los podemos usar.

-¡No entiendo!


-Todos los niños de este país están bendecidos. Es como si hubiesen sabido nuestras intenciones. 


-Los hijos de los católicos son rociados con agua bendita todas las mañanas en sus escuelas. Los hijos de los evangélicos y los judíos, en cambio, cantan un salmo antes de salir a la calle.


-¿Bueno pero los arabitos?- sugiere Nicedemo.

-¡Umpalumpa no quiere problemas con los hijos de la luna! y menos en estos tiempos, puede haber venganzas, responde Amiri con temor.

-¿Y los chinitos?

-¡Para Umpalumpa el hombre amarillo es impuro!- explica Menelik.


-¿Y los Sisanjos? ¡sus enemigos!

-Los Sisanjos saben de nuestra presencia y vistieron sus hijos con mantos blancos y humo de tabaco.

-¡PERO HAY GENTE ATEA! ¡QUE NO CREE EN NAAA!

-Ellos aumentaron la vigilancia de sus hijos, además, en este país los ateos son hipócritas en su incredulidad. Dicen que no creen en ningún Dios, igual se persignan y rezan cuando tienen temores y tribulación. El cura le echa agua bendita a los niños y ellos arriman los suyos para que también les caiga. Cuando oyen al evangélico predicar, se detienen a escuchar al menos un segundo ¡Así no se puede!






-¡O SEA QUE ESTOY JOD#$%&/O!


-No solo eso, el polvo que echamos todas las mañanas en helicóptero sobre las principales ciudades, para que el pueblo se debilite y acepte tu desastre en silencio y mansedumbre, se agota. Y este se paga en dólares y en efectivo, no a crédito; y debe ser pedido con tiempo- advierte Amiri.


-¡OH NOOOOO! Comandante Panelo…, Comandante Pajarito, Sai Baba ¡AYUDAME!

El Sargento García, de la Guardia de Honor, interrumpe la reunión tocando la puerta de la sala de reuniones.




-¡García! ¿Por qué interrumpe?

-Disculpe Señor, hay una novedad en la puerta 3.

-A ver, ahora ¿que?

-Tres sujetos vestidos como los señores aquí presentes, vienen con dos niñitos metidos en unos sacos. Ya llamamos a la PTJ para que se los lleve detenidos. Sólo era para informarle la irregularidad.

Los presentes en la reunión se miran entre sí con asombro.

-No, no, no, no, haga que esos truhanes entren que yo personalmente me ocupo de castigarlos.

Tres hombres ataviados con un estilo étnico difuso, entre africano y wayu entran en la sala de reuniones. Uno de ellos de la tercera edad y los otros dos, más jóvenes, cargando cada uno un saco de tela.

-Buenas noches. ¿Quiénes son ustedes?

-Buenas, señor presidente Nicodemo. Ve yo soy Geníbero y mis ahijados Jumpalumpa Obrayan y Alcibiades. Ve, nosotros estábano leyendo las tripas del chivo…


-¿Leen las tripas del chivo? Para leer las tripas del chivo se necesita un amplio conocimiento de las artes oscuras- responde asombrado Shakakúm.

-Ve como te iba diciendo: Leí yo en las tripas del chivo, que cogiera la Lara-Zulia y que los primeros dos coñ%$tos que viera vendiendo mamón, los montara y se los trajera a vos, mi presimiente. Yo no me confié, porque a veces, las tripas del chivo son traicioneras. Así que partí dos cocos. Y en la rajadura del Coco, vi la cara del comandante…



-¿Vio la cara del comandante en la rajadura del coco? ¡El oráculo del coco roto habló!- Memadou se hinca de rodillas y hace un cántico con los brazos abiertos.

-¡A ver los muchachitos que trajeron!- exige Nicodemo. Alcibiades y Obrayan voltean los sacos en el piso y los dos niños caen al suelo lloriqueando:



“¡QUIERO A MI AMAAA! ÑEEEE”

-¡Que niños tan feos nos trajiste!- exclama Nicodemo con horror.


-Verg#% ve, er códice dice claramente: “Almas puras e incentes”… no dice nada de que “tiene que ser más bonito quel bebé Gerber”.


-¡Faltan dos horas para la media noche! ¡Vamos a hacer el “Pacto” a la brevedad posible! Además, estos niños son más bonitos que los niños de Somalia, y están más alimentados-, responde Amiri, cansado de las quejas de Nicodemo.


En el sótano de Miraflores, en una galería cercana a las salidas subterráneas de emergencia, iluminado por velones negros, está el altar dedicado a Umpalumpa. Una puerta tallada en madera negra con tenebrosas imágenes de seres mitad humanos y mitad animales, en gestos de aparente agresión contra figuras humanas que parecen estar ardiendo en un mar de llamas. Estrellas de cinco puntas volteadas pintadas en rojo, blanco o negro, dependiendo de la superficie. Extrañas imágenes y objetos metálicos quemados u oxidados. Flores marchitas y en frente un largo mesón de mármol blanco, para los sacrificios.

Los cinco sacerdotes mayores Umpalumpa bajan al sótano por una escalera de piedra, seguidos por Nicodemo que viene vestido con una bata de paño color rojo. Más atrás vienen los tres feligreses Unpalumpa con los dos niños lloriqueantes, traídos arrastras. Al final del cortejo, tres guardias del "Colectivo", kalashnikov en mano, aseguran la puerta.

Cerca del altar hay una enorme pero antigua tina de zinc, traída del museo del Libertador, donde Nicodemo se despoja de la bata y se sienta -¡UUUUYYY que frío! Mira tú Makonem, acá está la lista de los deseos que me dijiste ibas a revisar.


-Déjame ver- toma Makonem la lista.- ¿Estas pidiendo vida eterna? ¿Estás loco?- pregunta Makonem con decepción.

-Bueno chico, pa no morirme como Panelo.

-Umpalumpa separaría el alma de tu cuerpo de inmediato, haciendo que “vivas eternamente”, como una entidad sin cuerpo físico.

-¡Bueno tabien puéj! Pero necesito salú para no morirme como Panelo.


-Umpalumpa te dará fortuna ilimitada si se la pides. Así podrás pagar todos los médicos que necesites. Pedir deseos a Umpalumpa no es cosa de juego ¡Ten cuidado con lo que deseas o se te será concedido. Umpalumpa no quiere deseos vagos o incompletos, porque entonces lo dejas a él decidir y él no se da mala vida, hará de ti lo primero que se le ocurra. No te vaya a pasar como al Rey Beduino del Sahara Occidental, que le pidió a Umpalumpa en el “Pacto”, ser blanco, tener mucha agua y ver muchos traseros ¿Sabes en que lo convirtió?

-¿En Hugh Hefner?

-¡NO! ¡Lo convirtió en Poceta!

-¡Verg#” mi pana! Ayúdame tú a acomodar esta lista entonces!- le pide Nicodemo a Makonem.

Entre cánticos en leguas antiguas, tambores, llamaradas y humos de tabacos y hiervas exóticas, se acerca la media noche, hora del sacrificio.

El viejo Geníbero y sus dos ahijados permanecen como espectadores. Eventualmente hacen coro o bailan de manera caótica con las manos en alto. Mientras los “niños” continúan lloriqueando, pero no hacen mayor resistencia, el miedo los mantiene paralizados, tanto que Amiri y Menelik decidieron ni siquiera atarlos.

Es el momento de la ofrenda. Amiri y Menelik toman sus cuchillos ceremoniales y los empuñan en alto. Shakakúm y Makonem preparan las vasijas donde caerá la sangre de los sacrificados.

Mamadou destapa la botella de “agua de bababdí”, con hiervas aromáticas, que Geníbero trajo como humilde ofrenda para el ritual.

El licor es verde fosforescente y ligeramente espeso. A pesar de las partículas brillantes en suspensión, el líquido no es turbio y su fuerte aroma a alcohol perfumado es del agrado de los sacerdotes mayores.



Los hombres del “Colectivo” han colocado sus Kalashnikovs a un lado, mientras tocan los tambores intensamente.

Cuando el reloj marque las doce, Mamadou escupirá el licor y los cuchillos se hundirán en los pechos de los poco agraciados infantes, que miran de un lado al otro y siguen lloriqueando.

Mamadou empina la botella y el chorro de alcohol toca su lengua, sin sospechar, que las partículas que flotan en él, como brillante escarcha, es sodio en estado sólido, que al entrar en contacto con la saliva, hará combustión, incendiando el Fuego Valirio, provocando una enorme y descontrolada llamarada.

La explosión saca del trance a Amiri, que es alcanzado por el fuego. El “niño” colocado en su extremo del mesón toma el cuchillo, y lo hunde en su cuello y luego lo arroja contra el hombre del “Colectivo” que cuida la entrada al sótano, rodando muerto  por las escaleras.

La “niña” patea a Menelik, que cae de espaldas contra el altar, echando al suelo todo lo que está detrás de él. Los frascos se quiebran y los vidrios filosos se entierran en su cuerpo.

Mamadou es una antorcha verde que incendia todo lo que toca.


Geníbero, Obrayan y Alcibiades sacan de sus mantas étnicas pistolas P99 con silenciador. Obrayan acaba con los tamborileros con tan sólo cuatro disparos, Geníbero acaba con Makonem y Obrayan dispara repetidas veces contra la tina de Zinc donde se encuentra Nicodemo atrincherado y pegando horrorosos halaridos de auxilio.


El Sargento García y el Cabo Reyes, de la guardia de honor, cuidan la entrada al sótano y escuchan el zaperoco.

-Mi Sargento ¿me asomo a ver?

-¡NOOO! Te va a pasar lo que al teniente Matute. Que en una de esas ceremonias se prendió el mismo zaperoco y cuando se metió a ver qué pasaba, no volvió. Hasta le pagaron a la familia más para que no preguntaran más por él.

-¡Ave María Purísima!- reyes se persigna.

-Mejor vámonos donde el Chino Yung, allí debajo de puente Llaguno, llegó pañales y café Fama de América.

-¿Toca su número de cédula?

-¡Nohombre! Es media noche, no le pares a eso.

Los dos soldados se retiran y al cabo de unos segundos comienza a salir humo negro por las hendijas de la puerta del sótano. La puerta se abre, tumbada por Nicodemo que cae al suelo desnudo, humeante, manchado del tizne. Se pone de pie de inmediato, corre por todo el palacio y gritando desesperado “¡AUXILIO! ¡SOCORRO! ¡MAGNICIDAS! ¡MAGNICIDAAAAAAAS! ¡COF COF!”


Sale humo negro de una de las alcantarillas del bloque 2 del Silencio. La alcantarilla se alza y salen de ella @Cerrorista, que se despoja de su máscara de el viejo Geníbero. Luego sale Alcibiades, que en realidad era @ElPadrino. Ambos meten medio cuerpo en la alcantarilla y sacan a @ZelloPillín, un enano disfrazado de “Niño”, y miembro activo de “La Hermandad”, Luego sacan a @Amanditaterrible, la enana disfrazada de  “Niña”. Por último sale @Karlovingio (Obrayan). Una camioneta Ford Blanca, se estaciona cerca del grupo, manejada por @Catwoman, se montan rápidamente en ella, incluso desde la ventanilla trasera y se pierden en la ciudad.



El único sacerdote mayor Umpalumpa que ha sobrevivido al sabotaje es Shakakúm, al que le ha caído la pesada tina de Zinc en las piernas. Todo el altar está siendo consumido por las llamas y este pide auxilio. De pronto se escucha el sonido de una cerradura abrir una puerta. Es la puerta del altar. Se supone que tras esa puerta hay un muro, pues la misma está simplemente colocada allí no más. Pero la puerta se abre dejando ver el lúgubre mundo que está en una dimensión paralela a la nuestra.

-¡OH SEÑOR! ¡QUE VERGÜENZA!, se supone que este desastre no debía pasar. Perdóneme la vida- suplica Shakakúm, muerto del pánico ante la sombra que se le aproxima.

¡NAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHH! aaah aah ah...

Toda la ciudad hablaba al siguiente día, del trueno que parecía un grito. Aunque no llovió por todo el país esa noche. Otros no le pararon, pues pensaban era un atraco.

Mientras los bomberos tímidamente apagaban el fuego del sótano, la Fiscal ha ordenado “Regular” las redes sociales, ya que por culpa de estas, se regó un falso rumor… que terminó saboteando un ritual ....¿Quién sabe?

 =======================================================================
Dedicado a los tuiteros. La única ventana de libertad que aún nos queda.

La segúnda del temporada #ComandantePanelo no ha terminado.
No te pierdas el próximo capítulo:

EL NEGRO Y LA LANZA

Verde Maduro Podrido tercera temporada
 Verde Maduro Podrido primera temporada
Sigueme por twitter